Cuidado
me han dicho que sí,
pero, ¿quién lo dijo?
pues alguien que de tanto desear
fue feliz!..., consiguió lo que quería,
aún tiene lo que deseaba,
a pesar del tiempo,
a pesar de los años.
¡Cuidado!, que de tanto desear se hace realidad, me dijo,
pero ¿porqué cuidado?, pregunté
si es lo único que, estimo,
sea razonable para mi no cuidar.
¡Cuidado!- repitió - ¡Cuidado!
que tanto como para le pena,
también hay que estar prevenido,
para la felicidad.