sábado, julio 22, 2006

Ahora a esperar , que...



me atreví,

¿me creeré el cuento después de la decepción?
saldrán palabras, pero ¿las grabaré
regalándoselas al quien quiera leerlas?
¿seguiré haciéndolo?
¿continuaré exponiéndome
exponiéndolos
exponiéndote?.

me atreví,

a cruzar el río,
con tanto miedo, que lo hice después de pensarlo mucho,
tanto, demasiado, en exceso,
y por lo mismo me tiré sin salvavidas,
sin una cuerda en la cintura o en la orilla,
me tiré así, tal cual
en piyamas, con pantuflas,
con el pinche en el pelo,
sin pintura, ni perfume,
así, tal cual.

me atreví,

ahora dejaré que la corriente decida,
si me lleva y me ahoga
o me empuja a la orilla,
dejaré que la corriente que decida,
pero ¡cuidado!
que tu perteneces a esa corriente,
así que ten piedad conmigo,
¡no!.. mejor no
deja que los demás decidan por ti,
no te metas, no te inmiscuyas, no te comprometas,
que la vida tiene tantas vueltas,
como las vueltas que daré tratando de no morir,
en el intento por sobrevivir.

domingo, julio 02, 2006

Chuquicamata



Yace el pueblo bajo polvo,
polvo blanco y arena
pa’ que reluzca en gloria
el cobrizo tesoro minero

El hospital perdido anda
buscando almas en pena
pa’ sanar lo que tengan
pa’ algo que sirva la pena

Pa’ que hablar de la plaza
que como museo queda
y el teatro donde cantara Illapu
una larga tarde acalorada

Y la pulpería hace años
que está muerta
a pesar de que mil veces
mi madre compró en ella

Lo demás está en la memoria
de miles de cristianos que vivimos
todos juntos pero no revueltos
en el pueblo ahora fantasma, como una salitrera

La minera los echó a todos
a vivir como pudieran
ya no existe en el norte
mi natal ciudad minera.