Mi casa
En Chuqui, Codelco les prestaba casas a sus trabajadores. A medida que el trabajador ascendía, le entregaban una casa mejor. Y esta fue en la última casa en la que viví en Chuqui, claro que se nota que la pobre fue abandonada hace muchos años.
Quizás quiénes vivieron en ella después de que mi familia se vino a Santiago...quizás quiénes fueron sus últimos habitantes, quizás la hayan cuidado como nosotros lo hicimos.
Nostalgia, recuerdos, olores, sonidos, imágenes...el viento soplando, el sol fuertemente iluminando el mediodía, los cordeles con ropa secándose meciéndose por el viento, arena en el aire y entrando por los recovecos de ventanas y por debajo de la puerta, mi mamá llegando de la pulpería con calor y su cara partida por el clima..
posted by Paitoca at 9:43 p. m.
13 Comments:
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Hermoso posteo.
Linda casa.
Bellos recuerdos...
Me fuí de Chile sin conocer nuestro desierto, lo más lejos que llegué pal norte fué La Serena. Conocí otros desiertos... y los amé, pero ese lo debo, sí, lo debo.
Alguna vez volveré, sumiso, a pagar esa deuda.
Y será pagada con alegría.
Muy lindo, Pame.
Bonitos recuerdos, y que tristeza da pensar que ese tiempo que para uno fue tan bonito, tan especial y feliz ya no volverá, pero así es la vida.
Un abrazo
Las casas nos marcan, están vivas y llenas de recuerdos. Y pesar de ellos uno sigue adelante, dejando recuerdos abandonados en otras lugares.
Un bello post, me tocó de una manera bien especial.
saludos
Doc: veo que dejaste en Chile tus raíces. Cuando vuelvas date una vuelta por el Norte, el desierto tiene sus encantos.
Antonio: todos los momentos vividos forman nuestros recuerdos...y la vida se basa en ellos.
Sinisterjazz: bienvenido a mi blog, que también ha dejado marcas en mi vida. Este mes me voy de mi actual hogar, que construyó mi papá y en el que viví desde el '87. Muchas marcas y recuerdos. Espero que este post te haya dado una alegría más que nostalgias.
Gracias a todos por sus palabras.
Un abrazo,
Pame.
Hermosas, la nostalgia y la historia. Un abrazo cálido Pame.
hola hermana, esta vez tu posteo si que me sorpredió, pucha pa fea la casa!, pero que grandiosos los recuerdos que habitan allí, las tres corriendo por entre las puertas, que no eran giratorias, eramos nosotras las que las recorríamos en círculo,tu cuidando no agitarte mucho...la chica metida en la lavadora cuando jugabamos a las escondidas, las sesiones de tom y jerry infaltables en esos años de escaza televisión,comernos a escondidas el Milo (seco) mientras la mamá iba a comprar, yo llendo dos veces al día al colegio viajando cuatro veces de Calama a Chuqui todos los días de lunes a viernes...uf! no habrá sido mucho? y tu tiradita viendo tele...el rostro de todas partidas por el viento y el sol, aunque la crema lechuga era infaltable, como infaltable era el paseo a la plaza los domingos...y las diabladas!, los años nuevos en que se quemaban muñecos en las calles, o cuando el papá nos llevaba a pasear para ver si veíamos al viejito pascuero y justo pasaba en ese momento a la casa y no lo pillabamos...son tantos los recuerdos que tengo (aunque ustedes se rían de mí)
Es increíble cómo hasta el lugar más inóspito es bello para uno cuándo es un niño feliz, porque esos años fueron muy buenos, felices, amadas y cuidadas no nos faltaba nada...y si bien esa pequeña y funcional ciudad será sepultada por el bien de todos los chilenos, yo no quiero sepultar mis recuerdos y me doy permiso para contar un poco más, compartirla contigo y tus ciberamigos...
un besote
karina
Sí, comerse el Milo seco o con un poco de agua, como una pasta...los paseos a la plaza para ver las diabladas y comer helados con forma de Los Picapiedras, ver Tom y Jerry (tu sabes mejor que nadie que todavía me puedo sentar un buen rato frente al TV para verlos) y el clásico Chavo del 8.
Sí, nuestras caritas partidas por el sol y el viento, y yo siempre sentadita para no ahogarme (menos mal que esa etapa de bronquitis quedaron olvidadas hace mucho).
Bueno, fueron momentos alegres, que siempre recordaremos...
Un beso para ti hermanita y nos vemos hoy en el cumple de la Sandra, nuestra hermana menor.
Pame.
Pame: también se de nostalgia, mucho tal vez, más de la cuenta... Perdí la cuenta de en cuantas casas ya viví, se que más de 30. De algunas tengo un grato recuerdo, que se hace algo doloroso a medida que el tiempo pasa demás de la cuenta... Si eres nostálgica, podrás identificarte con alguno de mis posts.
Besos del Ratón de Biblioteca!
Te recomiendo visitar el Blog de un muy buen amigo mío. El felino Unsologato. No te arrepentirás.
Besos con nostalgia!
Sí, lo visito regularmente igual que a tí. Lo que pasa es que me cuesta dejar comentarios...pero ambos blogs son muy buenos.
Un abrazo,
Pame.
Gracias maulladas por los elogiosos estipendios de sonrisas paralelas.
Un día de estos Pame, te leo toda y maúllo en tu tejado.
Felino: el saludo.
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